viernes, 29 de enero de 2016

CASI TODOS LOS TÚRDIDOS A LA SACA

Un poco tarde pero aquí está el resumen de mi estancia en Casinos (Valencia) para fotografiar, sobre todo, a todos los túrdidos peninsulares en una sola sesión, de la mano de Turia hides y su responsable, Salva Llavata, al que doy las gracias por su inestimable ayuda, así como a su padre, a Joan y Josep, con quienes compartí experiencias en los hides que utilicé esos días. Gracias a todos.

El título define bien mi experiencia allí, pues solo fallaron los zorzales real y alirrojo. Sin duda, el invierno raro que estamos padeciendo ha influido en que en las fechas elegidas no hiciera el frío previsible y las aves no aparecieran. De hecho, tres días después, las temperaturas bajaron un montón y los zorzales sí se asomaron al hide. Una excusa perfecta para repetir. El resto se portó de maravilla, bimbé el mirlo capiblanco (más bien lo observé, por fin, en condiciones) y aparecieron avecillas notables que mostraré en las siguientes fotos. Además del hide, quedé maravillado del lugar elegido para su ubicación, en plena sierra de Javalambre, en un paisaje silencioso y hermoso, tranquilo y que rezumaba naturaleza. Empezaremos por este hide y su idílico paisaje porque no fue el único hide que visité esos días…

HIDE EL SABINAR

Aquella mañana, desde la salida del pueblo, ya se intuía que el frío no iba a ser el protagonista. Y que algún zorzal podía fallar. Pero mantenía la esperanza. Siempre hay que mantenerla. Tras aproximadamente una hora de trayecto, ya en Teruel, el paisaje cambiaba radicalmente ante nuestros ojos. Un valle verde, casas en ruinas o semihabitadas, algún rebaño de ovejas en el infinito y la extensa falda colmada de sabinas, principalmente, y algún pino. Y, sobre todo, silencio, calma. No pude por menos que, tras bajar del vehículo, cerrar los ojos y respirar profundamente, agudizando los oídos. No hay mejor manera de empezar el día que con una bocanada de pura naturaleza. 

Como he dicho al principio, el principal objetivo eran los túrdidos, y no fallaron. Bueno, alguno sí. En un hide perfectamente integrado en el paisaje, cómodo y amplio, se presentaba ante el fotógrafo un bebedero y algunos posaderos que las aves usaron sin pudor alguno. No me extiendo más y paso a las fotos de esa excelente mañana.



Mirlo capiblanco Turdus torquatus torquatus



Mirlo capiblanco Turdus torquatus torquatus



Mirlo capiblanco Turdus torquatus torquatus



Mirlo capiblanco Turdus torquatus alpestris



Mirlo capiblanco Turdus torquatus alpestris



Mirlo capiblanco Turdus torquatus alpestris



Mirlo común Turdus merula



Zorzal charlo Turdus viscivorus



Zorzal charlo Turdus viscivorus



Zorzal común Turdus philomenos



Zorzal común Turdus philomenos



Piquituerto común Loxia curvirostra



Gorrión chillón Petronia petronia



Pinzón vulgar Fringilla coelebs



Picogordo Coccothraustes coccothraustes


HIDE EL CASETO

Tras una agradable reunión, con chuletada incluida, Josep y yo pasamos la tarde en este hide, rodeado de silencio y árboles frutales, en una agradable jornada. Falló el roquero solitario, citado en días anteriores, pero no empañó la buena sesión vespertina que tuvimos. Vamos con unas fotos.



Curruca capirotada Sylvia atricapilla
macho



Curruca capirotada Sylvia atricapilla
hembra



Acentor común Prunella modularis



Carbonero común Parus major



Curruca cabecinegra Sylvia melanocephala
macho



Colirrojo tizón Phoenicurus ochruros
macho



Escribano montesino Emberiza cia



Lavandera blanca Motacilla alba


HIDE EL LENTISCO

Mañana dedicada al azor, en un claro de una pequeña zona de olivar y pino. Apareció prácticamente sin luz y apenas nos dedicó una sesión de poco más de una hora y media. Pero suficiente para llevarse algunas fotos a casa y disfrutar de la belleza y elegancia del que Félix Rodríguez de la Fuente bautizó como "el pirata de la espesura".



Azor común Accipiter gentilis



Azor común Accipiter gentilis



Azor común Accipiter gentilis



Azor común Accipiter gentilis



Azor común Accipiter gentilis


Esto fue lo que dio de sí esos días de enero en el límite de las provincias de Valencia y Teruel, sin el frío esperado (sobre todo en Teruel) y con el único pero de los zorzales real y alirrojo pero, como dije al principio, es un motivo extra para volver. Todo estuvo de cine, espero repetir pronto. Gracias chicos.

Gracias por asomaros por aquí, volved cuando queráis. Un saludete.